Fuente-Tójar celebra San Isidro con danza y tradición

En el corazón de la Subbética cordobesa, el pequeño municipio de Fuente-Tójar se prepara cada 15 de mayo para una celebración que no tiene nada que envidiar a las grandes fiestas de Andalucía. La localidad organiza su Feria Real, un evento que reúne a miles de personas para rendir homenaje a San Isidro Labrador. Esta fiesta se extiende durante cuatro días, coincidiendo con el fin de semana más cercano a la fecha, y está llena de tradición, música y danzas.

Los Danzantes de San Isidro: seña de identidad de Fuente-Tójar

Una de las características más destacadas de esta festividad es la participación de los Danzantes de San Isidro, un grupo de ocho hombres dirigidos por el «Maestro», que realizan un baile tradicional en honor al patrón del pueblo. Aunque no se sabe con certeza el origen de esta danza, se cree que comenzó entre los siglos XV y XVIII. En sus primeras ediciones, el baile tenía un carácter pagano, pero con el paso del tiempo se integró en la festividad religiosa de San Isidro.

El baile y la indumentaria de los Danzantes

El baile de los Danzantes se realiza en varias ocasiones durante la procesión del patrón, destacándose por su peculiar coreografía. Los participantes visten una indumentaria única que incluye sombreros decorados con flores de papel, camisas blancas con encajes, fajas cruzadas y alpargatas blancas. Esta vestimenta es una de las principales características que hace de este baile una joya del folclore andaluz.

Un premio al folclore

La danza de los Danzantes de San Isidro fue reconocida en 1963 con el Primer Premio Nacional de Danzas Antiguas en Madrid. Este galardón subraya la importancia cultural de una tradición que se mantiene viva en Fuente-Tójar y que atrae a miles de visitantes cada año.