
El número de trabajadores autónomos en España sigue creciendo, y son cuatro comunidades autónomas las que lideran este incremento en el primer cuatrimestre del año: Andalucía, Baleares, Comunidad Valenciana y Murcia. Según los últimos datos ofrecidos por la Seguridad Social, estas regiones concentran gran parte del crecimiento neto de afiliaciones al Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA) registrado entre enero y abril.
Andalucía se sitúa a la cabeza del ranking, con un aumento notable de nuevos autónomos, especialmente en sectores como el comercio, la hostelería, la construcción y los servicios profesionales. Esta tendencia responde tanto al empuje del emprendimiento como al dinamismo económico de la comunidad, que sigue consolidando su posición como una de las locomotoras del autoempleo en España.

Baleares también destaca con un repunte importante, favorecido por la temporada turística que comienza a activarse y que impulsa la creación de negocios estacionales, principalmente en hostelería, restauración y servicios al visitante. La Comunidad Valenciana y Murcia completan el listado de las autonomías con mayor crecimiento de trabajadores por cuenta propia, en buena parte gracias a un entorno favorable para el emprendimiento y al apoyo institucional con medidas específicas.
Este aumento contrasta con otras regiones del país donde el crecimiento ha sido más moderado o incluso negativo, debido a factores económicos, demográficos o de mercado.
Desde las asociaciones de autónomos, se valora positivamente este crecimiento, pero también se advierte de la necesidad de consolidar estos datos con políticas estables de apoyo, reducción de la carga burocrática y ayudas al inicio de la actividad. Reclaman también que se mantengan los incentivos fiscales y las bonificaciones para los nuevos emprendedores, así como mejoras en la protección social del colectivo.
El panorama actual refleja una evolución positiva en términos de autoempleo, con señales de reactivación económica en varias zonas clave del país. A medida que avanza el año, los expertos esperan que el ritmo de crecimiento se mantenga, aunque advierten de la importancia de vigilar el impacto de los costes energéticos, la inflación y la incertidumbre económica internacional en la actividad de los pequeños negocios.