James Webb III lanza un triple defendido de cerca por Gillet. Foto. Basketball Champions League.
Nueva victoria del equipo malagueño en la penúltima jornada de la fase de grupos de la Basketball Champions League.
Con el pase prácticamente asegurado a la ronda de octavos de la final de la Basketball Champions League, el Unicaja Málaga viajaba a tierras belgas para medirse al colista del grupo, un Oostende ya completamente eliminado al no ganar ningún partido. Se preveía un partido plácido para los de Ibon Navarro, aunque en este tipo de competiciones uno no puede confiarse.
Y eso lo vivieron de primeras los malagueños, pues el equipo belga se le subió a las barbas en un primer cuarto más igualado de lo esperado. Tras llegar a ir por debajo en el marcador, Unicaja se puso las pilas y le dieron la vuelta al marcador para cerrar los primeros 10 minutos con ventaja de tres puntos (16-19).
Ya en el segundo cuarto la calidad y el poderío físico del conjunto andaluz marcó la diferencia y, tras un triple de uno de uno de sus recientes fichajes, Chase Audige, comenzó a abrirse una ventaja en el marcador que no haría más que aumentar conforme pasaban los minutos.
Con seis puntos arriba en el marcador se llegaba al tercer cuarto, el cual rompió por completo el partido. A base de triples el equipo malagueño se escapaba más y más llegando a ponerse con +10 sobre un Oostende que, aún así y tirando de orgullo, no bajaba los brazos; aprovechando los pocos momentos en los que Unicaja levantaba el pie del acelerador para acercarse un poco en el resultado.
Este orgullo que quiso mostrar ante los suyos casi se convierte en una remontada épica en el último cuarto, pues tras un triple de Gillet y un 2+1 de Yaacov los belgas se pusieron tan solo cuatro abajo en el marcador. Un toque de atención suficiente para que Unicaja volviera a apretar y se escapara de nuevo en el partido tras unos dos minutos y medio espectaculares. Un triple de Castañeda a falta de un minuto mató por completo el partido, sellando de manera matemática el pase a octavos para los malagueños.
Con este triunfo no solo se asegura el liderato de grupo y, por ende, el pase a octavos, sino que ya sabe que irá encuadrado en el grupo K y que uno de sus rivales será otro español, el Joventut de Badalona, que le peleará el pase a cuartos y el quedar primero, lo que asegura ventaja de campo en las eliminatorias.
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