El tenista malagueño Alejandro Davidovich llegaba a los octavos de final del Masters 1000 de París como único representante español y con la difícil tarea de derrotar al número 3 del mundo y vigente campeón del torneo Alexander Zverev. El tenista alemán ya había derrotado al español en cinco de las seis ocasiones en las que se habían medido previamente, por lo que partía como gran favorito.
El partido fue casi un paseo triunfal para Zverev, que ya superó el primer set sin grandes apuros con un 6-2 final sin que Davidovich tuviera capacidad de reacción a pesar de ser él quien se pondría por delante con su servicio.

En el segundo set el malagueño pudo plantarle algo más de cara a Zverev, llegando a ponerse por delante tras romperle el saque al alemán. Sin embargo, tras ponerse 3-2 el número 3 del ranking ATP se la devolvería ganando tres juegos seguidos (uno de ellos en blanco) colocándose 3-5 en el marcador. Davidovich alargaría lo inevitable un juego más, pues Zverev cerraría con su saque el definitivo 6-4 con el que daría fin al partido y al torneo de «Foki».
Con la eliminación de Davidovich se acaba la participación española en París que ya vio como Alcaraz caía por sorpresa en los dieciseisavos de final.

