El Juzgado de Instrucción número 5 de Roquetas de Mar (Almería) ha decretado prisión provisional para un hombre investigado por el atropello mortal de un ciclista ocurrido el pasado 10 de febrero en la carretera de Alicún, una vía muy transitada de la localidad. El conductor, presunto autor de los hechos, se dio a la fuga tras el impacto, dejando tras de sí un rastro clave para su identificación: una de las matrículas del vehículo, que se desprendió en el momento del siniestro.
Según fuentes de la investigación, el accidente se produjo en torno a las 20:00 horas, cuando varios testigos alertaron al servicio de emergencias 112 Andalucía al encontrar a un ciclista gravemente herido en el arcén. A pesar de la rápida intervención de los servicios sanitarios, el deportista falleció en el lugar debido a la gravedad de las lesiones sufridas.
La Policía Local de Roquetas de Mar y la Guardia Civil de Tráfico iniciaron de inmediato una investigación conjunta para esclarecer los hechos. Los agentes localizaron indicios materiales en la zona del siniestro, entre ellos la placa de matrícula que permitió identificar el vehículo implicado. Gracias a este hallazgo y a diversos testimonios, se pudo localizar al presunto autor en su domicilio, donde fue detenido. El coche presentaba desperfectos compatibles con el atropello, confirmando su implicación directa.
Fuentes cercanas al caso señalan que el conductor circulaba a gran velocidad por una vía de tráfico lento y que realizaba maniobras en zigzag, poniendo en peligro a otros usuarios de la carretera. Un testigo corroboró estos comportamientos temerarios, lo que refuerza la hipótesis de una conducción imprudente.
El juez ha ordenado prisión provisional comunicada y sin fianza para el acusado mientras continúa la instrucción del caso. Se le investiga por homicidio imprudente y omisión del deber de socorro, delitos que podrían acarrear penas de prisión si se confirma su responsabilidad.
El trágico suceso ha reavivado el debate sobre la seguridad vial de los ciclistas en las carreteras secundarias, especialmente en zonas con alta afluencia de deportistas. Asociaciones ciclistas han pedido una mayor presencia policial y medidas preventivas para proteger a los usuarios más vulnerables de la vía pública.

